Desde que el miércoles pasado el presidente Javier Milei le apuntó directo, cuando ante una pregunta de Esteban Trebucq puso a su compañera de fórmula electoral cerca de “la casta”, la vicepresidente de la Nación, Victoria Villarruel, mantuvo silencio. Dicen cerca suyo que analiza qué contestar “sin romper”, y que ya verán el modo, el momento y la vía para hacerlo. Por lo pronto, dio alguna señal este fin de semana, al contestar de manera indirecta hacia una referente del mandatario.
Puntualmente se dirigió a la diputada Lilia Lemoine, muy cercana a Javier Milei, quien suele destratarla en las redes y en cuanta entrevista le hacen. Por empezar, se ha referido a la vicepresidente con el apodo “Vichacruel”. Ingenioso, por cierto, lo cual se merecía -entenderá el villarruelismo- una respuesta también ingeniosa.
Es la que dio Victoria Villarruel, ya no a través de un posteo directo, sino como respuesta a una usuaria que citó el apodo. La titular del Senado expresó puntualmente: “Debo decir que me da mucha gracia que me llamen así. Es un sobrenombre épico, lástima que se le ocurrió a los K, pero me genera una sonrisa”.
Fue, hasta ahora entonces, la única respuesta hasta ahora que ha dado Villarruel a los embates que puede esperar de parte del mileismo, sobre todo desde que el presidente ha liberado de ataduras a los suyos con sus expresiones.